Durante la conferencia matutina del lunes 8 de septiembre, la presidenta Claudia Sheinbaum recibió una denuncia ciudadana sobre los arrancones ilegales que se realizan en la ciudad de Chihuahua. El reporte indicó que estos eventos ocurren hasta 10 veces al día en la avenida Guillermo Prieto Luján, específicamente en las zonas de Olivos de Cartago, Hierro, Berilio y Centinela. A pesar de la presencia de cámaras de la Plataforma Escudo Chihuahua (PECUU), los incidentes persisten sin que se registre acción preventiva o sancionadora.
Reacción de la presidenta Sheinbaum
Ante la denuncia, Sheinbaum señaló que la responsabilidad de abordar este problema recae en los alcaldes y gobernadores locales, aunque destacó que el gobierno federal ha establecido protocolos con los C3, C4 y C5 para atender de manera inmediata los reportes al 911. Además, enfatizó que la implementación de cámaras de videovigilancia debe ir acompañada de una estrategia efectiva para su uso y supervisión.
El alcalde de Chihuahua, Marco Bonilla, anunció que el tema será abordado en la próxima Mesa de Seguridad Municipal. Expresó que, aunque la presidenta Sheinbaum no está familiarizada con el contexto local, se trabajará en conjunto con la Subsecretaría de Movilidad de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal para implementar medidas que inhiban estas prácticas peligrosas.
Por su parte, el subsecretario de Estado Mayor en la Secretaría de Seguridad Pública Estatal, Luis Aguirre, aseguró que se reforzará la vigilancia en puntos estratégicos de la ciudad para evitar la organización de arrancones. Destacó que, gracias a la vigilancia en puntos estratégicos, se ha logrado una reducción en el número de accidentes viales, aunque reconoció que algunas situaciones expuestas en redes sociales pueden dar una percepción de que es una problemática mayor.
El presidente del Consejo Consultivo de Movilidad, Luis Bustamante, indicó que se exigirán operativos específicos en la avenida Guillermo Prieto Luján para prevenir los arrancones. Resaltó que estas actividades no solo ponen en riesgo a los participantes directos, sino también a la ciudadanía en general que pudiera encontrarse circulando por la zona.